Universidades Privadas de excelencia
Uno de los mayores aportes a la educación chilena en los últimos 20 años, ha sido de las universidades privadas. Desde la reforma que permitió su creación, en 1981, se ha avanzado a pasos agigantados en cuanto a educación superior se refiere y las cifras así lo avalan. A principios de esa década la matrícula llegada a 118 mil alumnos. Hoy alcanza casi a un millón de estudiantes y más de la mitad de ellos, lo hace en universidades privadas.
En este periodo se han fundado universidades que tienen su centro en la formación profesional, instituciones con un fuerte desarrollo en investigación, y otras que han apostado a un mayor equilibrio entre docencia e investigación. Distintas fórmulas de educación superior, pero —al fin y al cabo— todas necesarias para el desarrollo del país.
Estamos orgullosos de ser parte de este cambio, sobre todo porque desde la Universidad del Desarrollo, nacida en Concepción hace 22 años, hemos contribuido a entregar educación de calidad, constituyéndonos en una institución que en dos décadas ha logrado posicionarse en el grupo de las 10 mejores universidades del país y estar entre las 3 mejores privadas.
Diversos indicadores cualitativos registran estos logros. Por un lado, está la acreditación, tanto de universidades como de carreras. Aún cuando el proceso pueda ser objeto de críticas, los años obtenidos, sin duda, reflejan la solidez de los distintos proyectos. Existen también exámenes más específicos como el Eunacom, que cada año rinden los egresados de Medicina, y en el cual nuestros alumnos han sido continuamente destacados.
Es igualmente posible constatar los estándares de excelencia al ver las alianzas y convenios que las universidades chilenas han suscrito con planteles internacionales, que se cuentan entre los mejores del mundo, buscando acentuar los sellos que aspiran a imprimir en la enseñanza que imparte. Por ejemplo, la Universidad Católica y la UDD, tienen sendos acuerdos con la Universidad de Stanford para trabajar en conjunto en temas de innovación.
En el caso nuestro también, tenemos una alianza con Babson College, reconocida como la número uno en la enseñanza del emprendimiento en el mundo, que apunta a estimular la capacidad emprendedora de nuestros alumnos en forma transversal.
De esta forma, en estos 22 años hemos logrado formar profesionales de excelencia capaces de contribuir desde la perspectiva de un trabajo bien hecho, con sentido ético y de servicio público.
Por eso, rechazamos con fuerza el ataque injusto y liviano de la Comisión Investigadora del Lucro en la Educación Superior de la Cámara de Diputados, donde se nos acusa de no cumplir con la ley.
Nuestro proyecto universitario nos llena de satisfacción y seguiremos avanzando con la mira puesta en la calidad académica, tanto en la docencia, la investigación y las actividades de extensión, aportando por esta vía al desarrollo y al crecimiento de Chile.