Permisología, seguridad y audacia presidencial
El académico y analista Joaquín García Huidobro ha advertido que el Presidente Boric entrega a Chile una señal de sensatez cuando afirma que enfrentar la crisis de seguridad pública es una tarea de Estado. Ante una crisis de la envergadura que enfrentamos hoy, el intelectual recomienda ala oposición no ignorar este gesto y man tener el debate en un tono razonable. Se trata de evitar que, como en los matrimonios, las discusiones a gritos terminen por hundir alos hijos, que en este caso somos los chilenos.
Compartiendo plenamente estas reflexiones, y ante la gravedad de la crisis que enfrentamos, mi intuición inicial es proponer en estas líneas una jugada radical al Presidente de la República, una de aquellas a la que nos tenía acostumbrados en su época más audaz como diputado. Creo que sería enormemente beneficioso para el Presidente, la centroizquierda y, sobre todo, los chilenos, que él rompiera su alianza con el PC. Esta sugerencia funciona no sólo en materia de seguridad, sino también de crecimiento económico, mejoramiento de la relación entre empresarios y políticos, gestión en educación, migración, e incluso en materia de relaciones internacionales.
Pero esperar aquello es una insensatez, lo sé. García Huidobro con pragmatismo y sentido de realidad, constata la ingenuidad de esperar que el Presidente apueste por los sectores moderados en la etapa final de su mandato, arriesgando reducir su base de apoyo en período electoral.
Por eso, mi sugerencia aquí es más modesta. Si no es viable divorciarse del PC, al menos es posible que con decisión el Presidente empuje las iniciativas destinadas a desburocratizar el aparato estatal, que sabemos paraliza la inversión y ha frenado el crecimiento. Él está llamado a enfrentar la cuestión de la permisología desde una lógica no fanática que nos permita avanzar como chilenos.
No se trata de que no haya controles para resguardar la inversión sustentable, sino de que sean racionales. Si sus socios del PC reclaman, Presidente, usted puede hacerles ver que incluso en la Unión Soviética se vivió un proceso de desestalinización de carácter social y político, que, entre otras medidas, flexibilizó rígidas estructuras que anulaban la libertad de trabajo y el emprendimiento.
Posteriormente, Gorbachov, a través de la perestroika y la glasnost, logró avances importantes para su pueblo. A diferencia de lo que suele pensarse, estas políticas no buscaban introducir libertad dentro del sistema marxista, sino flexibilizar un régimen rígido, burocrático y conserva= dor para poder desbloquear la inversión y modernizar el Estado.
Partamos, entonces, por la permisología, Presidente, como prueba de buena fe sin sesgos ideológicos, y muy probablemente verá cooperación de todos los sectores políticos y de la sociedad civil en materia de seguridad. No puede permitir que el peso de sus socios del PC agote sus energías y anule su espacio para disentir, para actuar de manera autónoma conforme a su criterio, Afortunadamente, usted no milita en el PC (¿o si. Su lealtad política no excluye el disenso y si ha de mantener su alianza política, imponga su criterio y autonomía en materias como seguridad y permisología, en donde la ideología no tiene cabida. Romper con ese yugo podría incluso favo recerlo desde una perspectiva electoral.
Eso nunca se sabe.