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UDD en la Prensa

La era de la nube llega al Estado

 Nicole Forttes Fuenzalida
Nicole Forttes Fuenzalida Directora Smartlab

No hay novedad en mencionar la cantidad de cambios que ha traído consigo la era digital y que el avance de la tecnología tiene un impacto transversal en todos los sectores de la economía y la sociedad. Cierto, somos privilegiados y estamos en una época de transformaciones tan importantes como la que se vivió con las máquinas a vapor en el siglo XIX.
El caso es que esta revolución está acompañada de muchas ventajas para las empresas y las personas, ya que está cambiando la forma de hacer negocios, suponiendo una democratización en la forma de hacerlos: pensando en global, pero actuando en local.
Además esta revolución resulta de la confluencia de elementos tan variados como los cambios demográficos, un mundo con menos recursos naturales y la llegada de importantes novedades tecnológicas: como los dispositivos móviles, la acumulación de datos y los servicios en la nube conocidos como cloud computing.
Sobre los últimos, según el informe Cisco sobre Cloud Computing (2013-2018) recien en los tres últimos años las empresas han comprendido la importancia de invertir en soluciones Cloud como parte de una estrategia que les permitirá tener más rendimiento y productividad en los negocios. Además de que su uso implica importantes ahorros relacionados al ámbito económico y a los tiempos de gestión de las plataformas electrónicas.
Por otro lado, señala el informe que a partir del 2014 se aprecia un crecimiento en la cantidad de tráfico en la nube a través de carga de trabajo y almacenamiento de datos y es que cada vez es más común almacenar diferentes tipos de contenido o aplicaciones, sin tener que disponer de una infraestructura propia que lo mantenga y no pareciera tener complicaciones.
La era digital está dando mucho poder a las personas, cada quien es un posible generador de contenidos y para el 2018 se espera que la mitad de la población mundial tenga acceso a Internet residencial, y sobre un 53% de los datos que generan esos usuarios será almacenado en la nube personal, el mejor ejemplo del uso del cloud personal es mandar un archivo adjunto que no cabe en Gmail, a través de Wetransfer o, en su caso, crear una carpeta compartida a la cual se puede acceder desde cualquier dispositivo a través de Dropbox.
En los últimos años se han realizado bastantes esfuerzos para promover el uso del cloud en los diversos sectores dentro del Estado. Pareciera ser que, en esta ocasión, la institución no está tan alejada de las últimas tendencias de comportamiento y uso de herramientas digitales que fomentan el trabajo con grandes volúmenes de datos. Desde el área de Modernización del Estado se ha venido fomentando y educando a toda la comunidad gubernamental sobre la importancia que tienen las tecnologías de la información en la vida de los ciudadanos, tanto como herramientas de trabajo, como de plataformas de participación y comunicación.
De esta forma, el cloud computing se transforma en una matriz de innovación para el ámbito público que provee no sólo ahorro económico sino la capacidad de conectarse con la ciudadanía a través de la creación de servicios y aplicaciones directas, fomentando la descentralización del aparato público, contribuyendo a la democratización y acercando los servicios a cada ciudadano, en cualquier lugar que se encuentre, por lo que pensar en una aplicación de servicios del Estado enfocada en las personas no es muy lejano. Mientras, en lo concreto, que hoy exista un convenio marco sobre la materia y exista una guía para comprender sus funcionalidades que está disponible entre la comunidad tecnológica gubernamental no es casualidad.
La adaptabilidad del Cloud Computing a los usuarios (ya sean personas o empresas) es una de sus mayores ventajas. Debido a sus actualizaciones constantes, quienes la utilizan se pueden beneficiar de sus últimos avances sin tener que hacer mucho, en cambio si cada usuario crea un mecanismo propio quedaría obsoleto al poco tiempo y sería necesario volver a crearlo de nuevo con los costos que eso implica.
Para el caso de las empresas, pareciera ser que los que fueran los grandes de la industria TI en los 80 y 90 hoy le están dando un giro al negocio a través de los sistemas de almacenamiento en la nube, sino ¿por qué IBM, Microsoft y otras empresas aprovechan de sacarle más partido con el match cloud computing y big data para crear unidades de negocios relacionadas con las innovaciones cognitivas a través del análisis de datos? Puede que sea porque el momento del Cloud es ahora.