Innovación Social
En los últimos 20 años la pobreza en Chile ha disminuido considerablemente. Según la encuesta de Caracterización Socioeconómica (Casen) 2011, la pobreza llegó al 14,4% y la pobreza extrema al 2,8%, cifras que muestran una disminución con respecto a la encuesta Casen 1992, en la cual la pobreza alcanzaba el 23,8% y la pobreza extrema el 8,8%.
Las cifras parecen auspiciosas, sin embargo estas no dan cuenta en profundidad de cómo el fenómeno de la pobreza se ha ido complejizando con el paso de los años. Problemas como la desigualdad y la exclusión se hacen cada día más evidentes, pero difíciles de entender en el marco de la globalización, que nos hace creer que el consumo de más productos puede ser sinónimo de un aumento en la calidad de vida de los ciudadanos.
A pesar de que el acceso a ciertos bienes y servicios ha mejorado, aún existen en nuestro país personas con un sinnúmero de necesidades insatisfechas, necesidades que están directamente relacionadas con la calidad de los productos y servicios entregados más que con la cantidad de éstos. El desafío de hoy no es sólo contribuir a la disminución de la pobreza, sino combatir todas aquellas inequidades asociadas a los problemas que nuestra sociedad puede sufrir en su conjunto. Debemos ir más allá de la medición cuantitativa; para generar cambios sociales de largo plazo, se requiere una mirada multisectorial y multidimensional.
La Innovación Social se presenta entonces como una herramienta que combina elementos de distintas áreas del conocimiento para crear nuevas soluciones para los problemas de siempre.
Son elementos que involucran aspectos de gestión, uso y desarrollo de tecnología, entre otros, para «producir» cambios sociales.
Es fundamental potenciar una cultura y entornos de innovación social, invitando a la ciudadanía y las instituciones a trabajar en la mejora de las condiciones sociales. Esto contribuirá a que las cifras reflejen el verdadero desarrollo social y económico que queremos alcanzar.
Para generar cambios sociales de largo plazo, se requiere una mirada multisectorial y multidimensional.