Emprender con franquicias
El emprendimiento genera empleo desarrollo, innovación, y otros sinfines de beneficios directos e indirectos. ¿Correcto? Pues no. Es un hecho medible: los publicitados Startups son empresas creadas principalmente para el autoempleo con pocas probabilidades de sobrevivir el «valle de la muerte.» (Scott Shane, 2009).
Eminencias en el emprendimiento como Paul Reynolds y Zoltan Acs indican que, en promedio, solo uno de cuarenta Startups empleará más de nueve personas en diez años. Como casi todo en la vida, el emprendimiento depende de la calidad y no de la cantidad.
Estos datos no deberían desalentar al emprendedor dinámico. Aquel emprendedor con experiencia laboral redes de trabajo, educación, y visión de oportunidades. Sin embargo, no todos los emprendedores son dinámicos.
Y no todas las ideas de negocio están motivadas por la oportunidad basadas en la innovación, y orientadas en la exportación. Para esto tipo de emprendedores «comunes» existe una alternativa que conlleva una mayor probabilidad de éxito y un menor nivel de riesgo: las franquicias.
PRIMER-FRANQUICIADO
Ciertamente, las franquicias pueden disminuir los riesgos. Pero exceptuando casos exitosos de primer-franquiciado, los retornos suelen ser limitados. Toda red de franquicias tuvo a su primer-franquiciado. El típico emprendedor primer-franquiciado tiene una visión innovadora y un perfil de riesgo relativamente mayor. El primer-franquiciado es, por lo general, un auténtico emprendedor dinámico.
Básicamente existen dos tipos de primer-franquiciado (según http://www.soyentrepreneur.com/). El primer tipo es una empresa madura que suele contar con experiencia y un número de unidades propias. En donde sus directivos conocen bien el negocio y han solucionado los problemas de operación. Pero solo falta hacer la transición y aprender a trabajar con franquiciados, en lugar de empleados. Lo cual es diferente.
El segundo tipo son las empresas jóvenes, que representan relativamente mayor riesgo porque implica atravesar la curva de aprendizaje propia y la de los franquiciados. Sin embargo, es así como la mayoría de las franquicias más exitosas se iniciaron, incluyendo Ray Kroc de McDonald’s o Fred DeLuca de Subway.
Convertirse en primer-franquiciado no es sencillo. Primero hay que establecer el sistema de operaciones que se pretende franquiciar. Luego se debe abrir un segundo establecimiento prestando particular énfasis en afinar la estrategia de marketing y en reforzar a la relación con los proveedores. Simultáneamente se debe documentar todos los procesos y procedimientos. Y al final, es aconsejable contratar los servicios de una consultora especializada en la estructuración de franquicias.
Del éxito del primer-franquiciado depende toda la red. Pero no todos tenemos las posibilidades (principalmente económicas) para ser primer-franquiciado. Los emprendedores que conforman la masa crítica de emprender con franquicias son aquellos que compran sucursales de franquicias. Aquellos emprendedores que, por el efecto piramidal, pueden generar un impacto muy significativo en la sociedad en términos de generación de empleos. A diferencia de un Steve Jobs (emprendedor innovador) o un Howard Schultz (emprendedor primer-franquiciado), estos son ios emprendedores que con un poco de capital deciden abrir su propio negocio.
SELECCIÓN DE LA FRANQUICIA
Seleccionar, sin embargo, la franquicia adecuada es una tarea titánica. Se necesita analizar la empresa franquiciada, el producto o servicio, el área de mercado (comercial, industrial, distribución, y servicio), el contrato, y el soporte del franquiciante. Afortunadamente, la gran variedad de franquicias operando en el siglo XXI a nivel mundial nos abre un abanico importante de oportunidades.
La página web http://www.franquiciashoy.es/preguntas/4133/como-seleccionar-una-franquicia.html recopila algunos tips en la selección de franquicias:
(1)conocer con claridad las peculiaridades del sistema de franquicia;
(2)solicitar todos los documentos pertinentes a la central franquiciadora;
(3)contrastar la información con otros franquiciados;
(4)estudiar el contrato que regula las obligaciones de cada parte;
(5)y obtener información detallada sobre el plan de formación. También es aconsejable ir acompañado de socios capitalistas, tener sentido común, y contratar un abogado de confianza.