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UDD en la Prensa

Aporte del diseño al crecimiento

 Alejandra Amenábar
Alejandra Amenábar Facultad de Diseño

Cuando tomamos la decisión de refundar las Bienales de Diseño, en conjunto con la Universidad Católica de Chile y con el apoyo de la Asociación de Empresas de Diseño, nos propusimos como primer objetivo dar a conocer nuestra disciplina y lograr instalar en la opinión pública la idea de que el diseño, presente en todas las áreas de desarrollo de nuestro país, agrega valor. El desafío de entonces fue demostrar que Chile puede diseñarse en toda su extensión.
La 5a. Bienal supone un objetivo mayor: establecer la importancia estratégica de esta disciplina como clave para diferenciarnos a nivel global, fortalecer la identidad país y aumentar la competitividad. Así, dado que con esta versión pretendemos aumentar la presencia de la creación local en los mercados internacionales, la hemos denominado “Pensamiento Global, Creatividad Local”.
Queremos buscar más espacios para posicionar productos chilenos en el mundo y generar industrias de alto valor agregado en torno a nuestras riquezas naturales. Varios países ya han entendido esto y, en consecuencia, el diseño es un eje importante en sus economías.
Uno de ellos es Finlandia, invitado oficial a la 5a. Bienal. En este país han comprendido que la sensibilidad, las habilidades y las competencias de los diseñadores permiten desarrollar productos vanguardistas para el mercado global a partir del uso innovador de materiales tradicionales, sistemas constructivos autóctonos y estilos locales. Gracias al trabajo de sus diseñadores, hoy Finlandia es un país más orgulloso de sí mismo, más productivo y más cohesionado.
Otro ejemplo es Italia. Según cifras del centro de estudios Cosmit/FederlegnoArredo, el 2009 la industria de muebles en madera representaba, por sí sola, el 8% de los empleos del sector manufacturero italiano, constituyéndose como la segunda más grande y generando más de 400 mil empleos. La producción maderera y de muebles aporta 32,4 mil millones de euros a la economía italiana. El desglose de esta cifra debe hacernos reflexionar: mientras la producción maderera representa sólo el 37% del total, la de muebles alcanza el 63%. No es necesario recalcar que identidad y diseño son sinónimos en Italia.
Tenemos una gran oportunidad para aumentar los ingresos del país y agregar valor a nuestros recursos naturales a partir de una mirada creativa a nuestra identidad. Evidentemente, en un país donde cada año se cosechan 40 millones de metros cúbicos de madera industrial (según datos de la Corporación de la Madera) hay espacio suficiente para ambicionar una estrategia nacional basada en el apoyo al diseño. Si hoy la industria forestal aporta 130 mil empleos directos en Chile, ¿por qué no pensar cuánto aumentarían, por ejemplo, si se potenciara una industria de muebles en madera, al igual que en Finlandia o Italia? Lo mismo podría ocurrir con la industria del cobre, donde somos líderes mundiales.
Es importante aumentar los incentivos y esfuerzos orientados a apoyar que esto suceda. Podemos posicionar industrias, productos, servicios y tradiciones locales en el mundo. Para lograrlo es necesario aumentar la inversión en diseño y orientarla a la promoción de una identidad país basada en los frutos de nuestra creatividad.