Redes sociales
Según las referencias de búsqueda en Amazon llegó a mis manos The end of the Big, un libro del estratega Nicco Mele. A grandes rasgos, plantea la hipótesis que la tecnología digital empata a los individuos más allá de las organizaciones y que las empresas que tendrán éxito en un futuro cercano serán las que comprendieron la interacción digital.
El acceso a las redes sociales y la posibilidad de estar conectados todo el tiempo, sugieren el colapso de la institucionalidad tradicional.
El problema no pasa por internet o tener más acceso a teléfonos móviles sino porque toda persona puede estar conectada todo el tiempo.
Por un lado es bueno y es un desafío para las industrias de contenidos digitales del país, ya que las horas que se consumen navegando en la red en Chile bordean las 20 horas en promedio, considerando que es tiempo en que los usuarios consumen información en diversos ámbitos (redes sociales, portales informativos, servicios y entretenimiento) pero el conflicto radica en que en las redes sociales todas las voces hablan al mismo tiempo con lo que finalmente nadie escucha nada y se produce el caos.
Entonces en una época de conectividad radical, todas las personas tienen exactamente las mismas posibilidades de convertirse en stakeholders líderes digitales o como quiera llamarse.
El desafío -según plantea el autor- para las instituciones en esta nueva época pasa por cambiar la forma de organización. Hay dos problemáticas claras, primero la tecnología empujando el poder desde las instituciones a los individuos y el fallo de la institucionalidad que ha generado la creación de movimientos sociales que trastocan el establishment. El desafío radica nuevamente, en entender mejor la tecnología y las instituciones. Cierto, los negocios, la política y la cultura está siendo perturbada por el mundo digital, esto puede ser una alarma o una luz de esperanza pero es necesario hacer un alto y reflexionar cómo es la forma de interactuar con la tecnología.