Desde hace bastante tiempo, y especialmente durante todo este año, el Gobierno ha venido realizando grandes esfuerzos para que Chile sea cada vez más, un país de emprendedores. 2013 es el Año de la Innovación, que bajo el nombre de Imagina Chile, hace pocos días dio por iniciada su segunda etapa con una serie de actividades entre las que destacan un nuevo concurso de ideas a nivel nacional (el anterior recolectó 4.272 propuestas que fueron votadas por más de 150.000 personas) y una campaña que busca demostrar a los chilenos que con imaginación todo se puede lograr.
«Ninguna idea es imposible de realizar, por muy loca que parezca». Así parte el video que cuenta, de forma muy atractiva, la historia de Jenaro Gajardo, el chileno que fue dueño de la luna durante 44 años. Abogado pintor y poeta, Gajardo demostró gran creatividad e inventiva para resolver un problema, la que sin duda podría servir de inspiración en términos de la posibilidad y factibilidad de llevar ideas a cabo. Pero la innovación no se trata esencialmente de eso, y por ello el mensaje de esta campaña se puede potenciar.
Innovar es crear valor nuevo, único y relevante. La creatividad está al servicio de la innovación, es una parte del proceso en la que, sin duda, el personaje de esta historia destaca con creces.
Pero, además de destacar por la novedad de nuestras soluciones, la innovación debe inspirar principalmente por el sentido y el impacto en la creación de valor para las personas. Así, resulta fundamental anteceder al ‘cómo’ con el ‘por qué’ de nuestras propuestas, inspirarse inicialmente en las problemáticas y las oportunidades. No solamente queremos imaginar, sino imaginar Chile.