Consecuencias económicas de la guerra genocida de Rusia en Ucrania
La guerra rusa en Ucrania y la reacción mundial.
Hace casi dos meses Putin inició la invasión de Ucrania. Aunque Putin lleva una guerra imperialista, brutal y genocida contra el pueblo ucraniano, este se defiende heroica y efectivamente.
Los países desarrollados y democráticos han impuesto sanciones políticas, financieras y comerciales a Rusia, que son extendidas y profundizadas a medida que se conocen los crímenes de guerra que cometen los rusos en Ucrania.
Efectos económicos globales
Es difícil proyectar los efectos cuantitativos de la guerra debido a la incertidumbre sobre las condiciones bajo las cuales terminará el conflicto y sobre las reacciones de Putin a las sanciones económicas, a la oposición rusa interna y al apoyo militar de Occidente a Ucrania. Solo sabemos con certeza que la economía mundial crecerá menos y sufrirá mayor inflación debido a la guerra. Estos impactos se transmiten a través de cuatro canales.
Rusia representa solo el 3,1% del PIB mundial en 2021, mientras que Ucrania es solo el 0,4%. Si en 2022 se destruye el 40% de la economía de Ucrania y la caída del PIB de Rusia es de 12%, entonces la economía mundial se contraerá un 0,6% debido a este primer canal.
El segundo es a través de los precios. Rusia es un proveedor muy importante de petróleo y gas, representando el 11% de la producción mundial de petróleo y una gran parte de la producción mundial de gas. Además, suministra el 27% de las importaciones de petróleo de la UE y el 41% de sus importaciones de gas. Por otro lado, Ucrania y Rusia combinadas representan entre el 10% y el 30% del suministro mundial de fertilizantes y de productos agrícolas esenciales (trigo, maíz y aceite de girasol). Por lo tanto, los precios de estos y otros productos primarios han aumentado significativamente. La inflación mundial se incrementará en aproximadamente 2,5% este año debido a este canal, erosionando los ingresos y la demanda privada.
El tercer canal es la interrupción del comercio y de las cadenas de suministro, así como el flujo gigantesco de refugiados ucranianos a Europa. El último canal es la mayor incertidumbre global, que reduce los precios de los activos, endurece las condiciones financieras, debilita la inversión y estimula la salida de capitales de los mercados emergentes.
Los efectos de los cuatro canales de transmisión de la guerra a la economía global se reflejarán en el PIB mundial, cuyo crecimiento disminuirá del 4,2% al 3,1% en 2022.
Efectos económicos en Chile
Tres de los cuatro canales de transmisión de la guerra a la actividad y los precios en Chile son similares a los que he mencionado para la economía mundial.
Sin embargo, se agrega un efecto favorable. El mayor precio del cobre es beneficioso para la minería y los ingresos fiscales. Pero posiblemente este efecto no sea duradero. Por otra parte, los mayores precios de importaciones de energía (petróleo, gas), alimentos (trigo, maíz, aceite comestible) y fertilizantes reducen nuestros términos de intercambio, generando pérdidas de ingresos reales. La combinación de mayor inflación, mayor incertidumbre y posible deterioro de términos de intercambio causa una devaluación del peso, que intensifica en Chile los efectos inflacionarios del conflicto.
En el año 2021 crecimos un 11% –mucho más que el mundo– debido al carnaval fiscal y monetario del año pasado. Para el año 2022 se proyectaba un 2,0% de crecimiento, que, debido a la guerra, podría disminuir a 1,5%. Probablemente las autoridades económicas –en una situación actual de nulo crecimiento o recesión– reaccionarán adoptando políticas monetarias y fiscales más expansivas (o menos contractivas) para contrarrestar parte de los efectos adversos de la guerra sobre la inflación y la actividad en el país.
Desde el año 2019 Chile crece en tendencia significativamente menos que el mundo. La brecha de crecimiento será cada vez mayor en los siguientes años, debido a la incertidumbre política y la mala gestión económica de la administración actual.